Las acciones de Apple se mantienen bastante seguras para un mercado bajista y están perdiendo solo el 20% de sus máximos. Sin embargo, los inversores deben prepararse para una posible turbulencia en el futuro cercano, que será relacionada con la situación en China.
La política de tolerancia cero contra el coronavirus en China provocó que los trabajadores abandonaran la fábrica en Zhengzhou, para no quedarse atrapados en un bloqueo por un período indefinido. Actualmente, en lugar de 300 000 personas que se encargan de la producción de dispositivos, solo 100 000 pueden trabajar en la planta. La situación complica mucho el lanzamiento del iPhone 14 Pro y iPhone 14 Pro Max, y no está claro cuándo se resolverá. El retraso en la entrega de dichos modelos en la página web oficial de Apple es de 6 semanas. Resulta que los estadounidenses que ordenaron un teléfono inteligente para el Día de Acción de Gracias, recibirán el dispositivo solo para Navidad. Mientras tanto, los últimos tres meses son los más rentables para empresas que operan en el mercado masivo, ya que representan las fechas festivas más populares en EE.UU.

 

Apple planea transferir la producción de China a India, pero aquí surgen algunos matices. En primer lugar, eso puede llevar años. En segundo lugar, el fabricante corre el riesgo de perder el mercado chino, donde gana $75 mil millones. Para comparar, Europa aporta $95 mil millones y los Estados Unidos $153 mil millones. Existe una alta probabilidad que un cierre de la producción demasiado pronto, pueda provocar la prohibición de la actividad empresarial de Apple en el país por parte del Partido Comunista. Wall Street espera que los ingresos del fabricante crezcan 5% anual durante los próximos tres años, por lo que cualquier problema relacionado con China podría cambiar los pronósticos.